miércoles, 11 de abril de 2012

¿ALGUNA VEZ ALGUIEN ESCUCHARÁ MI HISTORIA?



(Cuento. Texto completo)
*Elan Aguilar

¿Alguna vez alguien escuchará mi historia?

Se trata de la chica que amó a los Beatles, que amó al chico nuevo de preparatoria, que amo a sus padres y hermanos, que amó la vida. Se trata de mí.
Ya empezamos a contar los días, falta menos para salir de vacaciones y terminar el año escolar. En mi caso significa terminar la secun. ¿Eeey Caty? ¿Dónde continuarás estudiando? ¿Por qué no te vas conmigo a la escuela de cultura de belleza? ¡Y ponemos una estética entre las dos! Me decía Bere.
No me considero una chica bonita menos ñoña, de esas que les gusta andar a la moda, o sonriéndole o haciendo poses a la cámara. Eso no va conmigo. Soy delgada, de mediana estatura, cabello medio quebrado y medio liso, y aun así me seguían muchos chicos o los chicos para no oírme pretensiosa. Ninguno me llamaba la atención y eso que todos tenían lo suyo.
Recuerdo a Erick, soñador empedernido. Hola Doña Mago, ¿se encontrará Caty? ¿Caty? Ese no es mi nombre pero ya era mío. A mis padres les daba por ponerle nombres de bichitos a todo mundo. “Porque son unas cositas” decían. De ahí que, desde que recuerdo, yo era su Catarina. Catarina mugrosita, Catarina sonrisitas, Catarina pecosita, su Catarina del sol. Y ya después llegaron los flojos, los que les gusta abreviar todo porque se cansan si lo dicen completo. Caty.
“If I fell in love with you, would you promise to be true. And help me understand”
No Bere, no sé aun lo que voy a estudiar. Por el momento no quiero estudiar nada ¿entiendes? Quiero tomar un año de vacaciones. El kínder, la primaria, la secundaría ¿y ahora qué? Ahora nada, eso es lo que quiero. Nada. Pero si algo sé es que cultura de belleza no será. Y no es que me desagrade Bere. Mis padres tienen sus propios planes ¿sabes? Creo que hicieron bien en decirme Catarina. Me siento como ese bichito. Sin poder, sin fuerza, sin hacerme escuchar. Estas aquí y ahora ponte acá. Y puede pasar la gente caminando y aplastarla. ¿Qué le pasa a la gente? Ahí va una cucaracha ¡mátala! Ahí va una fila de hormigas ¡mátalas! Ahí va una abeja ¡mátala! Y lo grave es ver a los padres inmutarse ante la falta de respeto hacia la vida de sus hijos. Me toco un día ver a un mocosito imbécil acompañado de la mamá que pateo a una paloma en la calle. El tamal andante como si nada.
Si así soy yo. Me gusta ser yo misma. Caty fíjate cómo se comporta fulanita, Caty no te pongas eso, no leas aquello, ve a misa, no veas lo otro, qué va a decir la gente. ¿Qué va a decir? Que digan misa. Doña Mago fue la que me pario y poca atención le pongo a sus comentarios. Pueden ir guardando esos comentarios para otra Caty.
Me gustabas mucho Caty, así, sincerota. Por supuesto, que hubiera yo dado por que te hubieras ido de estilista conmigo. Eso sí me saca de onda, no lo entiendo ¿sabes? Tu tan fuerte, tan segura de ti, jamás una cervecita ¡eso es para las pirujas! Caty que cabrona, jajaja! ¿Y no pudiste decirles nada a tus viejos? ¡Ni madres, yo no quiero estudiar la prepa! ¡Yo quiero mi año sabático! ¿No?
Ahora que veo el atardecer desde mi pueblo hacia el horizonte, lleno aún de campos de sembradío, el verde brilla con la luz rojiza de un sol inflado y majestuoso, la brisa suave, fresca, acaricia mi cuerpo, mi rostro, un riachuelo de agua cristalina, corre calmo, como esperando su momento a que lo describa ¿No sobramos nosotros?
¿A quién vera ese niño? Que ridículo ahí en la ventana cerrando el ojo ¿O será que tiene un tic nervioso? Ya hasta me perdí lo que decía el maestro. Lo bueno que era la presentación de cada uno. Moreno, alto, pelo chino ¿por qué lo de chino? Si los chinos son bien lacios. Cejas de conquistador. Labios ¿mmm? Medio trompudo. Eey, ¿ya viste mana? Ese chavo te está cerrando el ojo, eeh, eeh! Me dijo Silvia, la nueva compañera de prepa. ¿Qué diablos? Nunca me he fijado en un chavo menos moreno, pero que bien lo he descrito. Terminó la clase y él seguía ahí. Esperaba que no estuviera aguardando mi salida del salón. Hola yo soy Ricardo, pero todos me dicen Montroni, puedes llamarme Montroni ¿y tú? Puedes llamarme Caty. ¿Tienes otra clase? No ¿Ya te vas? ¿Puedo acompañarte? No gracias vivo aquí cerca, ya casi llego. No importa, te acompaño ¿me permites que te ayude con tus cosas? Oye ¿y te ha funcionado cerrar el ojo con otras chavas? Jajaja, no, es la primera vez que lo hago ¿te gustó? Pensé que te había entrado un mosquito.
“I´ve  got a feeling,  a feeling living inside, oh yeah, oh yeah, I´ve got a feeling, a feeling I can´t hide, oh no, oh no.”
¿Has sentido cosquillitas ahí? ¿Dentro de ti? ¿O sentir la sangre correr de los pies a la cabeza? ¿Que cambia el clima y todo lo sientes cálido? ¿Que no has ganado la lotería pero te sientes con suerte? ¿Que el tiempo se detiene y sabes que has guardado ese instante para siempre? ¿O que un relámpago te golpea? ¿Lo has sentido?
Caty. Ya me habían dicho tu nombre. Ya había preguntado por ti. ¿Sabes? Me gustaría que supieras que en realidad soy tímido, que solo me había besado con algunas chicas y había salido con otras solo por presión de los amigos. Pero el deseo por conocer a alguien, o sentir como palpitaba mi corazón cada vez que te veía, o sentirme a gusto con alguien, o gustarme el olor aun cuando sudabas, y no pensar cómo complacerte porque cualquier cosa te causaba risa, fue contigo. ¿Lo sabes, no? Ahora ya lo dije. ¿Qué me gustaría estudiar al terminar la prepa? Me preguntan mis padres y parecen preocupados. Los entiendo. Lo único que sé es que quiero hacer lo mejor que pueda Caty. Por ti y por mí. No digas nada ¿quieres? Que quiero guardar este momento solo para mí.
Me tomó de sorpresa la facilidad con que la gente realiza juicios sobre los demás sin poder darse cuenta que lo que critica en los demás es de lo que más adolecen. Quizá es la misma necesidad de encontrar una respuesta a su ignorancia. Fulano es un cobarde, golpea a su mujer, y al mismo tiempo el que juzga llega a casa y golpea al perro. Ah, decían algunos, es que no puedes comparar, un perro no es lo mismo que un humano. Menganita no tiene perdón de Dios, se realizó un aborto, los mismos que al tener cachorros la perrita los abandonaban a su suerte en el monte. Ah, los vuelvo a escuchar. Por eso siempre prefería alejarme de muchos, no quería terminar haciendo lo mismo, hablando sin ton ni son de muchos con tan poco. Sentía solo por escucharlos que me desgastaba, que me robaban mis energías. No gracias. Pueden seguir con sus vidas.
“It´s not the way you smile. That touch my heart.”
Por eso no me disgustaba tanto que me llamaran Caty, tuve una gatita blanca que llegó a casa sola, pequeñita, Caty le llamé. Un encanto de gatita. “Ey Caty, esa gata puede estar llena de pulgas o sarna, sácala de aquí!” La voy a bañar le dije a mi padre para que dejará de preocuparse. Nunca la bañe. Sentía que se podía morir de frio. Caty era una gatita entendida. Iba conmigo por la casa de arriba abajo. Y me acompañaba hasta la puerta cuando salía de casa. Le puse su cajita con arena y nada tonta, la tomó para tomar el sol, se retorcía en ella o se quedaba patas arriba. Y agarró una esquina del patio para orinar y hacer popó. Se estaba conmigo en el cuarto y cuando ponía “Baby it´s you” a Caty le daba por empezar a arrullarse con mi almohada. Gatita loca, le decía, me miraba y seguía haciéndolo. Caty pequeñita, era gustosa. Le compre unas croquetas ¿se las comió? No. Solo quería estar comiendo atún y leche. La leche se la daba a escondidas de mi mamá, pues era “su” leche light. Tenía su rollito de tela para jugar que le había confeccionado con un par de calcetines de Charlie Brown. Ya tenía todo rasgado al Snoopy. Caty dormía en mi cuarto encima de una frazadita rosa de Kitty que me habían regalado años atrás en un cumple, pero que siempre estuvo guardada en el ropero hasta que apareció su dueña. ¿Han visto el cráter de don Goyo? Debe ser inmenso. ¿O los cenotes sagrados de Yucatán? Algo así debe haber sido el hueco que hizo mi gatita Caty en mí. Cuando llegue a casa antes de las dos últimas clases porque habían faltado los maestros, y ver en su cajita de arena a Caty recostada de lado y su carita puesta en dirección al portón de la casa. Parecía dormida. Parecía esperarme. Caty gatita consentida, llegaste a casa sin avisar y te has ido igual. Caty pequeñita me diste mucho cariño.   
¿Por qué? ¿Por qué por qué se pregunta tanto la gente? Por qué esto, por qué aquello, por qué lo otro, por qué antes, por qué Dios, por qué la vida, por qué, por qué, por qué. ¿No se cansan? Entiendo que en la escuela uno tiene dudas y le pregunta a los profesores. Pero es con una finalidad y una respuesta con un propósito. Pero que cansancio con la gente preguntona. Y si les dices ¡No hay respuestas para todo! ¡No insista! Por un oído le entra y que viva su ignorancia y su testarudez. The Beatles ¿alguien se pregunta por qué? Hasta hoy no he escuchado a nadie preguntarse por qué sobre los fabulosos Beatles. Tan solo veo a la gente disfrutar su música y a los que no, pues simplemente escuchan la cumbia, la salsa o la banda y punto, digo, si se pueden comparar para preguntarse ¿por qué?
“I give her all my love that´s all I do,
and if you saw my love,
 you´d love her too I love her”
¿Por qué? ¿No, verdad? Simplemente la escuchas y la disfrutas y dices que bonito, que hermoso, ¡yo también la amo! No tengo duda que la gente que se ama es aquella que es auténtica. Y la vida es hermosa, los Hombres son con sus instintos los que se empeñan en hacerla difícil. Y muchos, por esa falta de conciencia, de sombras en sus vidas, señalan para todos lados buscando responsables de nuestras desgracias. Ni los amados se salvan de la estupidez humana, como mi amadísimo John, muerto cobardemente por la espalda a uno que antes le dio su autógrafo.
Sin que alguien me lo diga una cosa me dice mi interior, al ver la maravilla de la vida, la tierra fértil, los animales majestuosos de la selva, los domésticos del campo, los paisajes increíbles de mi tierra, la inmensidad de vida marina y su imponente mar, los increíbles sonidos de los truenos y rayos, la fuerza de los terremotos, la infinitud del cielo, la vitalidad del sol, lo refrescante del agua, lo cálido de una sonrisa, lo tierno de un abrazo, la magia del perdón, lo increíble de nuestra voluntad, lo maravilloso de la mente y el espíritu. Que nadie puede quitarle la vida a otro ser humano. No diré más porque empezarían los por qué.
Había un joven en el pueblo, caminaba de un lado a otro, de la entrada a la salida del pueblo, de una colonia a otra, del centro a la iglesia, de la iglesia al panteón, caminaba con su lazo, y a todo mundo le hablaba y a todos saludaba, indistintamente se refería, a la gente mayor que él, si era mujer tía, si era hombre tío. Definitivamente era el sobrino del pueblo. Y los tíos siempre le daban algo cada día, un pan, ropa, zapatos, tenis, un sombrero, monedas o billetes. Y a los que creía eran menores que él, les decía ñiña o ñiño no podía pronunciar la N en la palabra. Me pregunte alguna vez si los locos no éramos el resto. La “gente” tomando lo que no es suyo, poniendo impuestos a los demás, matándose entre hermanos, entre padres e hijos, los padres a los hijos, odiando, autodestruyéndose con drogas y alcohol, buscando el dinero fácil, destruyendo el mundo ¿Por qué dirían que estaba loco? ¿Por no bañarse? ¿Por no robar, matar, prostituirse, humillar, golpear?
Imagine there´s no heaven, it´s easy if you try, no hell, below us, above us, only sky.
No creo que debas preocuparte por nada; la vida no es como te adoctrinan los hombres, porque los hombres y su mentalidad limitada simplemente no es vida. La vida no es la religión que profesan tus padres, tus amigos, las mayorías o minorías. La vida no es de izquierda o derecha o de centro. La vida no es buenos y malos. La vida no es una nacionalidad o país. La vida no son héroes o villanos. La vida no es salir de blanco o de negro. La vida no es la moda ni los títulos. La vida no tener o no tener. La vida no es nada de esto. Así que no trates de complacer a los demás que la vida no es nada de ello. A veces parece que es algo tan simple como sus intereses o sus estados de ánimo. Si amanecieron de buenas todo es bueno y si amanecieron con dolor de espalda todo está de la… según sus gustos.
Un chico de mi colonia, Romeo, medio atolondrado, un día decidió dedicarse a vender ropa y calzado juvenil, me ofreció algunas veces y algunas veces le compre. No sé mucho de él. Pero un día amaneció su cuerpo en unas tierras de sembrar. ¿Qué hizo? Lo que haya hecho les aseguro que no era para quitarle su vida. De hecho nadie la tiene, y muchos se justifican con conceptos para matar: seguridad pública, terrorismo, moros y cristianos, caballeros, siempre los hombres se han justificado para hacerlo. ¿Quién les cree? No deja de sorprenderme la inconsciencia que habita en el hombre, y por ello mismo tampoco la factura que tendrán que pagar. Pederastas, empresas que tiran alimentos para manejar los precios en el mercado, asesinos, delincuentes, violadores, políticos que se sirven, abusadores, extorsionadores, defraudadores, monopolios, pero Romeo se dedicaba a sobrevivir en este mundo de; ustedes pongan el adjetivo que más les guste. Yo simplemente recordaré que murió a los veinticuatro y que siempre tenía una sonrisa para mí cada vez que nos cruzábamos en la calle.
Algo no les he contado, no me gusta el olor de la boca al levantarse ¿y a ti? No me gusta el olor de mis axilas, es incómodo cargar una toallita, es desagradable el olor; creo que la nariz la tengo desviada, los ojos grandotes, la boca chiquita, el cabello áspero, las piernas largas y delgadas, las manos largas, solo lo creo. ¿Seré de otro planeta?
“I once had a girl… or should i say, she once had me”.
Las historias son como la vida del hombre, se aferran a seguir pero todas tienen un fin aun sea una trilogía o más. O quizá deba decir que las historias son como sus dueños tienen un principio y un final. Me imagino que la Vida es una historia narrada por un ser Supremo, porque tiene de todo y no supe su principio y menos su final.
A pesar de tener una familia numerosa, mis padres, dos hermanas y dos hermanos, no sufrir carencias, el amor de ellos, a su manera claro, de salir a pasear, de ir al cine, nadar, visitar el campo, la playa, escuchar sus discusiones sobre futbol, política, religión, taranovelas (guaac!), de alguna u otra forma había un vacío en el estómago que nada llenaba, y por favor espero no juzguen mis palabras tan rápido y digan: le faltaba Dios, sus padres no la escuchaban, sus hermanos le hacían la vida difícil por ser la menor, estaba desubicada y todas esas frases ya hechas ¡por lo menos sean originales en una! Ese vacío seguía ahí, pensé tal vez que era el espacio que había dejado Caty. Pero no. Tengo entendido que no soy la única en sentir ese vacío, lo que sucede es  que algunos somos conscientes de ello y vivimos con ello y otros no se dan cuenta y otros que sienten “algo” lo tratan de tapar con alcohol, drogas, mujeres, hombres, dinero, comida, trabajo, fiestas, amistades, ropa, muebles, casas, carros, títulos, distracciones y quizá el alcohol no sea el primero por casualidad ¿o qué creen?
No lo sé si han pasado por ello pero cuando más tiempo pasaba conmigo misma, ese vacío iba disminuyendo, increíble ¡una paradoja! Pero recuerden, no me pregunten ¿por qué?
“Blackbird singing in the dead of night, take these broken wings and learn to fly, all your life”.
Seguramente no hay nada como la amistad. Si tienes un amigo sabes lo que digo. Con un amigo sabes que puedes fallar en algo y no te ofenderá, puedes fallar y no te criticará, puedes fallar y te perdonará, te perdonará de corazón. Y jamás lo reprochará. Un amigo es saber que cuentas con él o ella en cualquier momento, en cualquier lugar. Con tu amigo te sientes a gusto. Sabes que te acepta como eres. Un amigo cuando se va te deja un vacío que nunca  se llenará. Un amigo es un confidente, no te defraudará. Un amigo es leal, te defiende cuando no estás y siempre habla bien de ti en cualquier momento. Si tienes uno, cuídalo. Se leal, no lo critiques, habla siempre bien de él. Acéptalo como es, no trates de cambiarlo. Perdónalo. Si aún no lo tienes, encuentra uno. La vida es más confortable con uno.
“¿What would you think if i sang out of tune? Would you stand up and walk out on me? Led me your ears and i´ll sing you a song, and i´ll try not to sing out of key.”
  Nadie dijo que fuera fácil, no entiendo porque nadie habla de ello. Por qué, aun no lo sé. Quizá llegaré a tocar las estrellas o una sola, quizá. Aquí nadie dice lo siento, te necesito, dime tus secretos, quiero ayudarte. Aquí a nadie le importa. Vivimos en círculos y todos somos parte. Nadie dijo que sería fácil. En dónde estás cuando he extendido mi mano, en dónde cuando dije con un grito “no entiendo” desde el fondo de mi alma. Nadie dijo que sería fácil. Es una pena que tengan que continuar, tratando de alcanzar, tratando, cualquier cosa. Yo iré por mi estrella.  Allá donde habita el olvido.
 La vida es así, caprichosa, urgente, interminable, libre, oscura y brillante, fluye, quema, te moja, te toca, te llama, la vida somos todos y no es nada, es un viaje, un camino, corto o largo, pero tiene un destino, una meta, un sentido, y dando vueltas en el universo vivimos. Nada te darás cuenta, que tiene que ver contigo, simplemente la vida es, no lo tomes personal ni trates de entenderla, como lo has tratado de hacer conmigo. Acéptala.
(Jai Guru Deva OM, nothing gonna  change my world, Jai Guru Deva)
Estoy enamorada. Amo a mis padres y amo a mi novio; y a ninguno quisiera herir. No sé si fue lo mejor, pero si me ves aquí, vestida de blanco, escuchando a mis Beatles y con mi rostro en paz es porque he hecho lo correcto o porque la música me da paz, tú lo sabes mejor. Que más hubiera deseado entregarme a ti por amor, porque yo lo decido. Que más hubiera deseado salir de blanco y complacer los convencionalismos sociales de mis padres por amor. Pero no se puede complacer a todos sin tener la certeza que lo lograras, y eso cansa. Prefiero llegar hasta aquí. No te pido que me entiendas, solo que no me juzgues, que me aceptes, que lo aceptes. Tus muestras de afecto las agradezco, no sientas pena por mí. Yo ya no estoy más aquí, tendida en el sofá, vestida de blanco, perfumada, después del disparo nada. Mi espíritu sigue intacto, nada cambiará mi mundo. Que nada cambie el tuyo. Yo decido. 

*Elan Aguilar (1/sep.). Es un escritor, cuentista, poeta y guionista morelense. Es promotor de la lectura como agente de cambio social; sin afiliación política ni religiosa. 
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